20 de octubre de 2012

Mudá de los pasos.

En la noche del viernes se procedió a la mudá de los pasos... como si fuese una noche de cuaresma de esas que ya presagian con su aroma a incienso y azahar la llegada del Viernes Santo que enamora al soleano, tal y como si la Reina de la Soledad hubiese descendido de nuevo de su altar para recibir el beso amoroso que el pueblo pone en las divinas manos de la Señora, o como si el Señor del Viernes Santo estuviese enclavado en su cruz, esperando el desclavamiento y su posterior traslado al Sepulcro.
En esta ocasión es otoño y las lluvias han llegado anunciando poco a poco el inicio del mes de tosantos, se mudan los pasos, si, para dar paso al inicio de unas obras largamente esperadas, la construcción de la Capilla de la Hermandad de la Soledad...en el centro del pueblo que la tiene a Ella como dueña de nuestros corazones; el Compás de Palacio: lugar de privilegio en La Algaba. En este lugar estuvo enclavado el Palacio de los Marqueses de La Algaba, en este lugar estuvo temporalmente el Convento de Frailes Franciscanos cuando una riada del Guadalquivir se llevó por delante las paredes de dicho Cenobio y los citados marqueses acogieron en su casa a la comunidad franciscana hasta la reconstrucción del edificio de la Cruz, este lugar es el más alto del pueblo sobre el nivel del mar, tanto es así que la Parroquia y la Torre de los Guzmanes tienen su cota bajo el Compás.
El Compás de Palacio será si así Dios lo quiere el lugar donde con el tiempo reciban veneración los titulares de esta antiquísima hermandad.
La noche se despejó y los pasos anduvieron un camino nuevo para ellos, la carretera, el cruce...deseamos ver su pronta vuelta a la casa de los soleanos algabeños.