3 de junio de 2012

A Dios Dormido...

Buscó La Algaba a Dios Dormido lirio de su alma
 buscó en la flor del naranjo de sus recoletas plazas
 buscó en la estrechez de las tejas el roce y el reflejo en sus fachadas
 buscó en el árbol su Cruz y en el aire su mirada
 y en los rincones su luz y en las calles su llamada
y en el cielo el más azul ...pero con Cristo no daba...


Buscó el pueblo a Dios Dormido entre oración y plegarias
buscó entre aromas de fe la saeta en su garganta
 buscó entre un bosque de cera infinita iluminaria
 buscó entre cinto de esparto entre negra indumentaria
 entre capirote y cola entre ruán y alpargatas
 oraciones insonoras ...pero con Cristo no daba..


En el piadoso silencio La Algaba buscó sus plantas
buscó entre clavel y lirio entre cirios y entre varas
 entre incensario y naveta entre la música sacra
entre acólitos y preste a Cristo desesperada...
 A tres golpes de martillo Dios se acercaba  acercaba
 y buscó su canastilla de oscura caoba y plata
 y buscó entre cera para adivinar su cara
 y buscó entre las flores donde su Imagen destaca
 y buscó su muerte lívida fuente de sangre y de agua.


Las heridas de las espinas sobre sus sienes clavadas...
 y siguió buscando a Cristo, La Algaba desesperada...
 Buscó el nazareno a Dios y lo encontró en la plaza
 lo vislumbró en el compás de la laguna velada
 reflejado en contraluz de paredes y ventanas
entre los cañaverales de la cera consumada
 por las brumas aparentes que disipa la mañana..
encontró La Algaba a Cristo, Dios en su urna dormía.
Mientras el pueblo rezaba.