Hermanos en
Cristo.
Permitirme que mis primeras líneas
escritas como Hermano Mayor, sean de agradecimientos, a los miembros de la Junta de Gobierno
que en Cabildo General de Oficiales
depositaron en mí su confianza para el cargo de Hermano Mayor, como también,
dar las gracias y la bienvenida a los nuevos miembros de Junta de Gobierno que
se incorporan hoy a la Junta de Gobierno. Así mismo agradecer a los miembros salientes
de la Junta de Gobierno, su trabajo, esfuerzo y dedicación desarrollados durante
el periodo que han estado, como a mi predecesor
en el cargo, D. Jose Manuel Salgueiro
Morato.
En
estos momentos, se que la ilusión y la
motivación no nos falta, Tenemos este fantástico proyecto que es nuestra capilla, proyecto en el cual se viene trabajando desde hace más de 10 años.
Gracias a Dios, hoy en día ya hemos acometido la fase de la construcción,
como todos podemos ver. Siempre se ha dicho que para terminar algo, simplemente
hay que empezarlo y seguir y seguir y no decaer en el empello, hasta
terminarlo, cosa, de la que estoy seguro
que esta hermandad conseguirá, como siempre
ha hecho con todo proyecto
acometido. Para eso estamos en la
hermandad, para trabajar y aportar lo mejor de cada uno mismo de nosotros.
Tampoco debemos olvidar que
pertenecemos a una comunidad cristiana, como es nuestra Parroquia, y es por
ello que todos nuestros esfuerzos y mi compromiso personal irán encaminados a
trazar puentes de unión y fraternidad, y asumir un compromiso claro e
inequívoco con la Parroquia, porque en definitiva, Parroquia somos todos y todos nos debemos a
ella.
El ser Hermano Mayor de La Soledad,
es el mayor orgullo y honor que puede ostentar un Soleano, Orgullo que hoy
siento, creerme, como también supone una importante responsabilidad y
compromiso del cual no me puedo olvidar.
Creo y espero, estar a la altura del cargo para el que me habéis elegido, sin
duda aportaré ilusión, esfuerzo y dedicación, entregándome con fervor a las
labores que me han sido confiadas. E Intentaré ser un Hermano Mayor abierto a
todos y a todas las ideas, opiniones y
sugerencias que sean en beneficio de nuestra Hdad. (No se cuales son las claves
o cualidades para tener éxito, lo que si se,
que el querer contentar a todos, es el principio del fracaso). Con esto
quiero decir que cuando se gobierna o se gestiona un cargo, a veces las
decisiones no siempre son a gusto de
todos, pero no debe de haber duda que se hacen siempre pensando en el bien
general de la Hermandad.
Agradeceros y daros las gracias, por las muestras de cariño y afecto que he
recibido de todos vosotros, de forma
especial a mi mujer Toñi y mis hijas Esperanza y Teresa, estando seguro
que será el pilar más importante sobre
el que tendré que apoyarme, y seguro que no me faltará tu apoyo, amor y
comprensión.
Y para terminar, permitirme una vez
más, que lo haga pidiéndole a Ntra. Sra.
De la Soledad, al Santísimo Cristo Yacente y a nuestro Señor Resucitado, que me
de fuerzas, sabiduría y saber estar para
mi Junta de Gobierno, y que nunca nos falte el calor, amor y la bendición de nuestros titulares.
Francisco Gutiérrez Fiallo
Hermano Mayor